Y perder es ganar

Quisiste ganar

y ganaste perdiendo...

Yo abrí otra página,

mientras tú lees la anterior.

¿De qué me sirve que me amas?,

si ninguna vez me elegiste,

corriendo siempre tras lo superficial. ¿De qué me sirve que vendrás, cuando no quiero verte,

y sueño otros labios besar?

No quiero lastimarte,

pero el destino es irreversible:

lo que te haces solo,

nadie podrá quitar.

No te aferres al pasado

fue tan desastroso todo...

Yo sé que te tortura,

me duele y a mí sintiéndote sufrir.

Si siempre daba

y tú solo te aprovechabas,

¡yo nunca volveré ahí!

Ya viste,

darlo todo

no valió de nada.

Se destruyó tu mundo para aprender. Aunque las lecciones son

terriblemente caras,

algunos no aprenden…,

y se van.

Estás ya libre,

¡no te agarres al dolor!

¡Vuela alto!

Lo que tenía que pasar, pasó.

No es en manos tuyas cambiarlo.

Es demasiado tarde ya,

¡es tiempo de luchar

por lo mejor!